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Personaje histórico y héroe nacional riojano. Del mismo modo que Agustina De Aragón nació en eso, Aragón, y Danny De Vito hizo lo propio en Vito, Jarto nació en el pueblecito logroñés de Vino, junto a la frontera con Soria.
Pasó su infancia rodeado de toneles, en los que su padre lo encerraba de tanto en tanto, como castigo por mearse (homon.vulgar.=orinarse) en los vinos en proceso de maderación. Fué durante estas reclusiones cuando el pequeño Jarto empezó a dar forma a su plan heróico de liberación nacional de La Rioja.
Harto su padre (su padre se llamaba también Jarto) de las guarrerías del adolescente Jarto, que había sustituído las meadas por pajillas (homon.vulgar.= masturbaciones), lo envió fuera de casa a ganarse la vida. Esto no lo esperaba el jóven Jarto y, dado que no tenía ninguna experiencia laboral, decidió que había llegado el momento de poner en práctica su plan de liberación.
Reclutó un pequeño ejército de valientes soldados procedentes de las filas del PGB (Partido de la Gente del Bar) y se lanzó a la conquista de La Rioja alavesa. Obtuvo una aplastante victoria y, heróicamente, pasó a cuchillo a la totalidad de la población, que fue sustituída por cepas.
Tras esta primera victoria, Jarto inició su campaña contra los vasco-navarros, los navarros-no-vascos y los vascos-no-navarros. Estos pueblos opusieron una feroz resistencia al grito de "Ni Jarto De Vino!!!" (es decir, ni Jarto De Vino nos doblegará). Pero finalmente fueron aplastados, machacados y descuartizados sin piedad. Sus amputados miembros se utilizaron para enriquecer la fermentación de los vinos, y la solera obtenida se sigue usando en la actualidad.
El siguiente paso en la carrera de nuestro personaje fué la guerra contra los sorianos, a los que pilló desprevenidos excavando los restos de Numancia. Jarto cabalgó sobre ellos haciéndolos a todos prisioneros y, maniatados, los echó al Duero, donde se ahogaron. Posteriormente mandó repoblar la provincia con pinos (según numerosas fuentes, Jarto tenía una gran sensibilidad ecologista).
Cuando estaba planeando la conquista de Frasco, como buen traídor que había sido siempre, le tendió una trampa; citó a Jarto en Hendaya, donde esperaba que los Frasco y con una podadora de viñas le arrancó un Berlín, uno de los cuales impactó sobre la capital germana destruyéndola y el otro, que salió desviado, impactó sobre Hiroshima y posteriormente rebotó a Nagasaki. Los rusos y americanos se atribuyeron posteriormente estas proezas, que en realidad son riojanas.
La aparición en la escena pública de Mahatma Frasco, que no compartía la No-Violencia y que además aún tenía la cara hinchada por la ostia que le metió Jarto, se juró a sí mismo que apresaría y destruiría para siempre al guerrero riojano metido a santón. Especialmente porque Jarto declaró públicamente, como buen comercial, que "nuestro Frasco se empeñó en que sustituyese "La Rioja" por "Aspaña" en susodicha frase.
Frasco pactó con los americanos el secuestro y entrega de Jarto en la llamada "Operación Río Ebrio, ORE", mediante la cual los americanos enviaron un avión cargado con bombas atómicas que se la pegó en pleno vuelo contra la avioneta de la pancarta publicitaria "Marina d'Or Ciudad de Vacaciones" . Las bombas quedaron desparramadas por tierras y aguas de Palomares. Enfurecidos por este fracaso, los yanquis decidieron enviar a su mejor cuerpo de élite, los Rangers de Texas, al mando del célebre Chuck Norris.
Finalmente Jarto fué apresado mientras estaba dándose un morreo en una taberna Frasco personalmente quien lo ejecutó, disparándole 73 balazos con la pistola que su marido le regaló "por si algún Frasco moriría también al poco tiempo tras una penosa agonía por haber consumido un vino riojano envenenado que Jarto había logrado colar en palacio.
Los restos de Jarto descansan, embalsamados, en una barrica de vino de su pueblo natal, Vino.
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